En otras palabras, tienes que escribir un borrador que formará el cuerpo principal de tu carta, memo, email o redacción. No me malinterpretes, escribir un borrador no significa invertir el doble de tiempo si lo comparas con escribir de forma impecable desde el principio. ¿Por qué?
Lo primero, no te olvides de todo el tiempo que has malgastado simplemente en sentarte y mirar el monitor sin ser capaz de escribir nada. Incluso si inviertes algo de tiempo corrigiendo tus errores después de terminar el borrador, verás las ventajas de esta técnica ya que te permite escribir un texto con sentido desde el principio. Con independencia de su calidad, es un resultado tangible que puede mejorarse.
Lo segundo, corregir un texto que se ha escrito sin pensar mucho es más fácil y rápido de lo que piensas. Siempre he sentido que mi cerebro funciona mejor cuando no está limitado a múltiples consideraciones sobre la gramática y el estilo del idioma inglés. Recuerda, se tarda menos en corregir esos cinco errores en diferentes párrafos que invertir cinco minutos en cada párrafo intentando que sean perfectos desde el principio.
Lo que resulta sorprendente respecto a escribir borradores es que a veces encontrarás que hay muy poco que corregir. Personalmente, escribo mucho en inglés y tengo días en los que me resulta difícil pensar y hablar, por lo que el proceso de escritura también se ralentiza. Sin embargo, cuando reviso un artículo, muchas veces veo que está muy bien y no hay nada que añadir o eliminar. Tan sólo tienes que dejar que la creatividad aflore y escribirás de forma rápida y sin tener que pensar mucho.
Después de terminar el borrador, lee el texto en alto. No lo leas en silencio ya que hay errores que pueden escapársete. Tienes que leerlo en alto y con cierta sorpresa notarás los sonidos con poca fluidez que no viste al escribir el borrador.
Cuando escribes rápido y sin pensar mucho sobre el borrador, estás creando el contenido. Y cuando terminas y compruebas lo que has escrito, no tomas más parte en el proceso de creación. Tomas un papel de observador y ahora puedes encontrar mucho más fácilmente cualquier error en la gramática o estilo que durante el proceso de escritura.
E aquí los tres pasos principales de la técnica de escribir un borrador:
- Simplemente escribe tus pensamientos en papel o el ordenador.
- Revisa y corrige el texto que acabas de escribir.
- Utiliza el corrector ortográfico para asegurarte de que no te has dejado ningún error gramatical.
Post invitado de un estudiante muy entusiasta de inglés: Robby Kukurs. Robby escribe sobre cómo mejorar tu inglés hablado en su blog EnglishHarmony.com. También publica regularmente videos sobre cómo adquirir fluidez en inglés en su canal en YouTube
Léenos cómodamente en tu correo electrónico
0 comentarios:
Publicar comentario